El influyente NYTimes, publica que el Centro Ecocéanos, una organización que protege la biodiversidad marina, denunció montaje y cifras falsas: “Marine Harvest les pagó a unos 120 pescadores artesanales de Calbuco para que firmaran ante notario una declaración en donde aseguran haber capturado cientos de salmones”.
Santiago, 04 de octubre de 2018. (radiodelmar.cl)– La multinacional salmonera noruega Marine Harvest está en el ojo de la prensa mundial. Luego que Le Monde Diplomatique, Deutsche Welle, Science y The Nation, abordaran los impactos que el cultivo industrial de salmón está generando en ríos, lagos y zonas marinas, del sur de Chile, ahora el New York Times, el principal diario estadounidense que tiene influencia global, tituló este miércoles (03.10.2018), «Una fuga de casi 700.000 salmones en Chile alarma a los ambientalistas».
El reporte se refiere al escape de salmones desde un centro de engorda de estas especies en la isla Huar, Calbuco, en la Región de Los Lagos, ocurrido el 5 de julio. La Ley exige la captura del 10% de estos peces escapados, si no se logra esa cifra, se presume daño ambiental. Frente a esto, Marine Harvest presentó un informe al estatal Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca) donde afirmaba haber capturado el 27% de los peces fugados. La multinacional noruega afirma haber logrado esta cifra con un 5,5% de su registro oficial de capturas, más un peculiar contrato con pescadores en el que los hombres de mar afirman haber capturado miles de salmones, pero que los comercializaron en el mercado informal y otro porcentaje los consumieron.
Marine Harvest pagaba 7 mil pesos (unos 11 dólares) por cada salmón que los pescadores capturaban.
El influyente NYTimes, publica que el Centro Ecocéanos, una organización que protege la biodiversidad marina, denunció montaje y cifras falsas: “Marine Harvest les pagó a unos 120 pescadores artesanales de Calbuco para que firmaran ante notario una declaración en donde aseguran haber capturado cientos de salmones”.
el diario reportó que «las autoridades locales los acusan de participar en una pesca que no les corresponde, pues el salmón no se encuentra dentro del Registro Pesquero Artesanal que la ley chilena les exige. Los pescadores que negociaron con Marine Harvest arriesgan sanciones y multas».
“La gente aceptó firmar ante notario porque les pagaban 600 dólares y las condiciones en que viven los pescadores son muy precarias. La necesidad tiene cara de hereje”, dijo al TImes, un dirigente de la pesca artesanal.
